En nuestro cuerpo, existen células con cientos y miles de cromosomas. Estos son los responsables de transmitir los rasgos de una generación a otra. Pero, ¿qué son los cromosomas homólogos y heterólogos? Aunque ambos términos pueden sonar parecidos, hay una gran diferencia entre ellos.
Cromosomas Homólogos
Cuando se habla de cromosomas homólogos, se hace referencia a un par de cromosomas que contienen información genética de los progenitores y que se juntan para formar células hijas durante la meiosis. Es decir, los cromosomas homólogos son muy similares entre sí, ya que tienen el mismo tamaño, forma y secuencia genética.
Durante la mitosis, los cromosomas homólogos se separan para distribuirse en células hijas. Por lo tanto, el número de cromosomas en la célula hija es la mitad del número de cromosomas en la célula madre.
Por ejemplo, una célula humana tiene 23 pares de cromosomas, de los cuales uno proviene del padre y otro de la madre. Ambos cromosomas que comparten información (loci) y forma se consideran homólogos. Se podría decir que, en general, el 99,9% del ADN entre dos cromosomas homólogos es igual.
Los cromosomas homólogos tienen una función muy importante en la meiosis, ya que durante ella se realiza un proceso llamado recombinación. En este proceso, los cromosomas homólogos intercambian información genética para crear nuevas combinaciones de genes.
Cromosomas Heterólogos
Los cromosomas heterólogos, también conocidos como cromosomas sexuales, son diferentes a los homólogos porque son cromosomas que determinan el género del individuo.
En los humanos, los cromosomas sexuales son dos: el cromosoma X y el cromosoma Y. Las mujeres tienen un par de cromosomas sexuales XX, mientras que los hombres tienen un cromosoma X y un cromosoma Y XY.
Desde el punto de vista genético, el cromosoma X es más grande y contiene muchos más genes que el cromosoma Y. Además, los genes del cromosoma X también se encuentran en los cromosomas homólogos, mientras que los del cromosoma Y no lo hacen.
Por lo tanto, para los cromosomas heterólogos no se cumple el concepto de homología. Recordemos que los cromosomas homólogos tienen la misma estructura y loci y se recombinan durante la meiosis, mientras que los heterólogos no comparten la misma estructura, ni secuencia genética.
Cromosomas Heteromórficos
Los cromosomas heteromórficos son aquellos en los que ambos sexos tienen una versión diferente (una versión más larga que la otra). Esto no sucede con el cromosoma Y, ya que los hombres solo tienen una copia de este.
El cromosoma X es el único que no sigue el patrón de mendel porque solo hay una copia de él en los hombres. En el caso de las mujeres, la copia del cromosoma X de uno de sus padres se inactiva permanentemente para equilibrar la diferencia de dos cromosomas X en las mujeres.
Recapitulando
En resumen, los cromosomas homólogos son los que provienen de ambos progenitores, son muy parecidos en tamaño y estructura y se recombinan durante la meiosis. Los cromosomas sexuales, sin embargo, son diferentes de los homólogos dado que determinan el género del individuo y no son intercambiables.
Cabe destacar que estas diferencias entre los dos tipos de cromosomas tienen un papel fundamental en la genética y la herencia de características de una generación a otra.
Investigaciones Recientes
El estudio de los cromosomas, desde el siglo XIX, ha desbloqueado los secretos más profundos de la vida y los fundamentos de los trastornos congénitos y del cáncer.
En la actualidad, el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) cuenta con investigadores de renombre que llevan a cabo estudios sobre cromosomas para entender mejor las enfermedades relacionadas con ellos y cómo combatirlas.
Javier Benítez
Entre los investigadores del CNIO, otra de las personalidades destacadas es Javier Benítez, quien lidera uno de los mayores estudios de secuenciación del cáncer de España con casi 1.200 casos de cánceres diferentes.
El trabajo de investigación de Benítez se centra en áreas como la epidemiología genética, la genética del cáncer y la genómica, entre otras. Asimismo, ha contribuido en la identificación de nuevas mutaciones en varios genes implicados en el cáncer de mama.
Mercedes Robledo
Por otro lado, Mercedes Robledo trabaja en la identificación de mutaciones germinales en genes causantes de cánceres endocrinos hereditarios. Una de las mutaciones identificada, que afecta al gen MEN1, es responsable del 25% de los casos de cáncer de células de los islotes pancreáticos.
El trabajo de Robledo ha sido innovador y ha permitido avanzar en la identificación de pacientes con riesgo de desarrollar enfermedades relacionadas con la genética.
Miguel Urioste
Finalmente, Miguel Urioste ha liderado el desarrollo de una herramienta para el análisis bioinformático de resultados de pruebas genéticas, que permite una evaluación precisa del riesgo de cáncer en personas con antecedentes familiares.
El trabajo de Urioste ha proporcionado un impacto directo en la mejora de la prevención y el diagnóstico precoz del cáncer.
Conclusión
En conclusión, los cromosomas homólogos y heterólogos juegan un papel importante en la transmisión de información genética de una generación a otra. A diferencia de los homólogos, los heterólogos son diferentes entre sí y están directamente relacionados con la determinación del género en los humanos.
Gracias a la investigación continúa en el campo de la genética, se ha logrado un aprendizaje profundo sobre el papel de los cromosomas en la salud humana y cómo estos pueden afectar en la aparición de enfermedades.