La palabra “iglesia” es un término que ha sido utilizado a lo largo de la historia con diferentes significados para diferentes personas. Sin embargo, si nos remontamos a la fuente original del término, que es la Biblia, podemos encontrar una definición clara y concisa de lo que realmente significa la palabra “iglesia”.
Desde la introducción de esta palabra en la Biblia, ha sido utilizable de diversas maneras en el contexto cristiano. A veces se refiere a la comunidad de creyentes que se reúnen en un determinado lugar y a veces se refiere a la generalidad de todos los creyentes en Jesucristo desde la creación de la iglesia hasta la venida de Él. Pero independientemente de cómo se use, siempre se refiere a las personas y no a un edificio.
El Origen Griego de la Palabra “Iglesia”
La palabra “iglesia” proviene de la palabra griega “ekklesia”, que originalmente significaba “asamblea” o “reunión”. Esta palabra se usaba para describir las reuniones de ciudadanos atenienses que se congregaban para discutir asuntos importantes. Esta palabra fue adoptada por las autoridades religiosas cristianas para referirse a la asamblea o comunidad de creyentes.
En las Escrituras griegas, el término “ekklesia” se utiliza raras veces, pero principalmente para referirse a una reunión o asamblea. En el Nuevo Testamento, se utiliza 114 veces, y de estas veces, sólo se utiliza tres veces para referirse a la asamblea civil y las otras 111 se refieren a la iglesia cristiana.
La Verdadera Definición de “Iglesia” según la Biblia
La verdadera definición de la palabra “iglesia” según la Biblia se deriva de su uso en el Nuevo Testamento. No se refiere a un edificio o institución en particular, sino al conjunto de personas que han sido redimidas por la sangre de Cristo y que se han comprometido a seguir sus enseñanzas.
El apóstol Pablo, en su carta a los Corintios, describió a la iglesia como un cuerpo compuesto por muchos miembros diferentes que trabajan juntos en armonía con el fin de lograr el bien común. Es importante destacar que cada miembro tiene un papel importante que desempeñar y es necesario para el correcto funcionamiento del cuerpo.
En términos simples, la iglesia es la comunidad de creyentes en Jesucristo. Si bien la iglesia puede tomar muchas formas diferentes, su propósito principal es ser una fuerza para el bien en el mundo y difundir el mensaje del evangelio de Jesucristo.
La Iglesia como Cuerpo de Cristo
La Biblia se refiere a la iglesia como el “cuerpo de Cristo”, lo que significa que cada miembro es importante y esencial para el funcionamiento del todo. La cabeza del cuerpo es Cristo, y cada miembro tiene un papel importante que desempeñar para ayudar al cuerpo a funcionar correctamente y crecer.
El apóstol Pablo describió la relación entre los creyentes y Cristo como la relación entre un esposo y una esposa. La iglesia está unida a Cristo por un amor que es tan fuerte que se asemeja a un matrimonio. Al mismo tiempo, la iglesia también es un cuerpo, unidos para cumplir un propósito mayor.
La Iglesia según la Biblia vs. La Iglesia como Institución
Es importante distinguir entre la iglesia tal como se describe en la Biblia y la iglesia como institución organizada. Es fácil confundirse pensando que la iglesia se trata de reglas y tradiciones religiosas, pero lo cierto es que la iglesia es algo mucho más profundo.
La iglesia tal como se define en la Biblia se trata de personas reunidas en torno a su fe común en Jesucristo. La institución eclesiástica se trata de las estructuras organizativas que están diseñadas para administrar la iglesia y permitir que las personas se adoren juntas.
En lugar de enfocarnos en las estructuras y el liderazgo, es importante recordar que la iglesia debería centrarse en su amor y compromiso con Jesucristo. En lugar de enfocarnos en las creencias y doctrinas específicas, es importante recordar que la iglesia debe estar unida en el amor y el servicio a los demás.
La Misión de la Iglesia
La misión de la iglesia es difundir el mensaje del evangelio de Jesucristo y ser la sal y la luz del mundo. Esto implica trabajar para mejorar la vida de las personas, y en especial, los no creyentes y compartir el mensaje de salvación.
En los evangelios, Jesús habló sobre la importancia de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos. La iglesia tiene la tarea de mostrar este amor en acción, trabajando juntos para hacer una diferencia positiva en el mundo. Esto podría implicar ayudar a las personas necesitadas, trabajar juntos para solucionar problemas comunitarios o simplemente ofrecer una palabra de aliento a los que están pasando por momentos difíciles.
La Importancia de la Unidad en la Iglesia
La unidad es un elemento clave en la iglesia. La Biblia insiste en la importancia de que los creyentes trabajen juntos en armonía, y esto significa que debemos aceptar nuestras diferencias y tratar de superar inquietudes y divisiones.
Aunque es natural que las diferentes congregaciones tengan diferencias en cuanto a creencias y prácticas, es importante recordar que el amor y el compromiso con Jesucristo son temas comunes. La iglesia debería ser un lugar donde los creyentes puedan trabajar juntos para explorar su fe y hacer un cambio positivo en el mundo.
Aplicando la Palabra “Iglesia” en la Actualidad
Es posible que alguna vez hayamos escuchado la televisión algún sermón que hablará sobre la necesidad de construir una nueva “iglesia” para la comunidad. Sin embargo, por lo general, esta afirmación se refiere a la construcción de un edificio para la congregación, lo que en realidad no tiene nada que ver con lo que la palabra “iglesia” significa en términos bíblicos.
De hecho, el edificio, o la estructura, es sólo un medio para facilitar la reunión de los creyentes para adorar y trabajar juntos como un cuerpo de creyentes en Jesucristo. Debemos tener en cuenta que la iglesia es una comunidad de creyentes, no un edificio, y la construcción de un nuevo edificio no necesariamente hará que la comunidad sea más fuerte.
La verdadera fuerza de una iglesia viene de su compromiso con los valores compartidos y su amor y compromiso con Jesucristo. En lugar de enfocarse en el edificio o en las tradiciones religiosas, la iglesia debe centrarse en su amor, su compromiso y su misión en el mundo.
¿Qué significa la Palabra Iglesia Según la Biblia?
“La Iglesia” es un término que ha sido utilizado en diferentes formas y contextos a lo largo de la historia. Sin embargo, en la Biblia, la palabra “iglesia” se refiere a la comunidad de creyentes en Jesucristo. La iglesia es un cuerpo de creyentes que se reúnen para adorar a Dios, explorar su fe y hacer un cambio positivo en el mundo.
El amor y el compromiso con Jesucristo son los valores clave que unen a la iglesia. El edificio o la estructura de la iglesia son sólo medios para facilitar la reunión de los creyentes y no definen lo que realmente significa ser una “iglesia”. La iglesia debe trabajar juntos para difundir el mensaje del evangelio y ser la sal y la luz del mundo.
En lugar de enfocarnos en las tradiciones religiosas o estructuras organizativas, tenemos que centrarnos en la unidad y el amor que nos une como cuerpo de creyentes. La iglesia es un lugar donde los creyentes pueden trabajar juntos para hacer una diferencia positiva en el mundo y difundir el mensaje de salvación.
¿Estamos cumpliendo adecuadamente con la misión de la Iglesia hoy en día?
A medida que evoluciona el mundo, la iglesia debe adaptarse y cambiar para cumplir adecuadamente con su misión. Pero, ¿estamos haciendo esto adecuadamente? Es fundamental que los líderes de la iglesia trabajen juntos con los creyentes para comprender cómo sus prácticas y enseñanzas pueden ser más relevantes en la vida cotidiana de las personas.
La iglesia debe ser una fuerza para el bien en el mundo, y esto implica trabajar juntos para hacer una diferencia positiva en la vida de las personas. Debemos centrarnos en el amor y el compromiso con Jesucristo y recordar que la iglesia es una comunidad de creyentes.
Si la iglesia se centra en estas cosas, trabajando juntos para difundir el mensaje del evangelio y hacer una diferencia positiva en el mundo, será capaz de cumplir adecuadamente con su misión y marcar una diferencia duradera en nuestra sociedad.
