Los amortiguadores son una pieza clave en el correcto funcionamiento de un vehículo, ya que tienen la misión de absorber las irregularidades del terreno y mantener el vehículo en contacto con la carretera en todo momento para garantizar la seguridad del conductor y los pasajeros. Es importante resaltar que durante su vida útil, los amortiguadores pueden presentar diferentes fallas que afectan su funcionalidad y, en algunos casos, pueden poner en riesgo la seguridad del vehículo.
¿Qué función cumple el aceite en los amortiguadores?
Los amortiguadores de los vehículos dependen, en gran medida, del aceite para funcionar, ya que este líquido actúa como elemento amortiguador de la vibración y como lubricante del conjunto. El aceite juega un papel importante en la absorción de choques y vibraciones, ya que el pistón se mueve dentro del cilindro, pero no puede hacerlo sin fricción. Esto podría causar un desgaste prematuro de los componentes y la pérdida de la capacidad de absorción de choques del amortiguador. Por esta razón, el aceite es esencial en el sistema de amortiguación, y es la falta de aceite en los amortiguadores una de las fallas más comunes, lo que puede causar algunos inconvenientes en la conducción.
¿Por qué se puede salir el aceite de los amortiguadores?
Existen varias causas por las que el aceite del amortiguador puede salir. Una de ellas es la rotura de los sellos o retenes de los amortiguadores. Estos sellos, que están ubicados en ambos extremos del cilindro de amortiguación, se encargan de evitar que el aceite salga del cuerpo del amortiguador y contaminar el entorno. Si se rompen, puede salir aceite del amortiguador y afectar el rendimiento del amortiguador.
Otra causa puede ser el desgaste de los componentes internos del amortiguador, que, con el tiempo, pueden sufrir daños, lo que puede hacer que el aceite escape por una fuga en el cuerpo del amortiguador. Además, los componentes periféricos del mismo, como silentblocks, rodamientos, tornillos pasadores, etc., también pueden causar fugas de aceite si no se encuentran en perfecto estado.
¿Qué sucede si el aceite del amortiguador se sale?
Si el aceite del amortiguador se sale, se producen varios efectos negativos en el vehículo. En primer lugar, el golpeo y la vibración se notarán más, ya que el amortiguador perderá su capacidad de absorción de baches e irregularidades del terreno. Esto puede hacer que el vehículo se sienta más inestable en la conducción, lo que aumenta el riesgo de accidentes.
También se producirá una mayor fricción entre las partes del amortiguador, lo que puede producir un desgaste prematuro en los componentes y aumentar el riesgo de rotua y mal funcionamiento del amortiguador. En los casos más graves, la rotura del amortiguador puede provocar daños en otros elementos de la suspensión, como pueden ser los muelles, las varillas estabilizadoras, etc., lo que aumentará el costo total de la reparación.
¿Cuáles son los síntomas de un amortiguador sin aceite?
Si el aceite se sale del amortiguador, notaremos que el vehículo se siente más suelto y nos hará falta más tiempo y distancia para frenar. Además, los baches y los badenes serán notados con mucha más intensidad de lo normal, y la estabilidad direccional se verá afectada, especialmente en las curvas.
Una de las consecuencias más notorias es el rebote excesivo en el vehículo, es decir, el balanceo o movimiento vertical oscilatorio del vehículo después de pasar sobre un bache o una irregularidad en la carretera. Esto se debe a que el óleo, elemento normalmente encargado de la absorción de estos impactos, se ha acabado.
¿Cómo identificar si hay una fuga de aceite en el amortiguador?
Existen varios procedimientos para detectar si hay una fuga de aceite en el amortiguador. El más común es realizar una inspección visual. Si se observa una humedad aceitosa en el cuerpo del amortiguador, es posible que se esté produciendo una fuga, lo que indica la necesidad de una revisión inmediata.
Otra forma de comprobar si hay una fuga de aceite en el amortiguador se realiza mediante un chequeo táctil. Para hacer esto, se debe presionar el amortiguador varias veces y luego frotar la mano en el cuerpo del mismo. Si se siente una textura grasienta en la superficie del amortiguador que antes no estaba, es probable que exista una fuga de aceite.
En cualquier caso, si observamos alguna pérdida de aceite, es muy recomendable acudir inmediatamente a un taller mecánico para que nuestros amortiguadores sean revisados y reparados, ya que el estado del mismo afectará la seguridad en la conducción.
¿Qué hacer en caso de fuga de aceite?
Lo primero que se debe hacer si se detecta una fuga de aceite en el amortiguador es llevar el vehículo a un taller mecánico inmediatamente. En el taller, los mecánicos especializados inspeccionarán los amortiguadores en busca de signos de fugas o daños en los componentes que afecten el rendimiento del amortiguador.
En algunos casos, basta reemplazar la junta defectuosa y volver a poner aceite nuevo en el amortiguador. Pero en la mayoría de los casos, aunque se pueda reemplazar la junta, la recomnedación es cambiar el amortiguador.
La sustitución del amortiguador es importante, ya que cada uno está diseñado para trabajar en un rango específico de temperaturas y esfuerzos, de modo que no es recomendable repararlos más de una vez. Los amortiguadores tienen una vida útil, por lo que es normal tener que reemplazarlos periódicamente.
¿Cómo se mantienen los amortiguadores en buen estado?
Para prolongar la vida útil de los amortiguadores, es necesario realizar su mantenimiento en los intervalos recomendados por el fabricante del vehículo. En general, es recomendable que los amortiguadores sean revisados y reemplazados cada 80.000 a 100.000 kilómetros, aunque esto puede variar según las condiciones de uso del vehículo.
Mantener los amortiguadores en buen estado implica conservar el aceite en su interior y asegurarse de que las juntas, sellos y otros elementos de la suspensión estén en buenas condiciones. Además, es importante no sobrecargar el vehículo y evitar la conducción agresiva o imprudente, ya que esto aumenta el desgaste de los amortiguadores y reduce su vida útil.
En cualquier caso, si sospechamos que hay un problema con los amortiguadores, es importante acudir a un taller mecánico para que los profesionales realicen una revisión adecuada. Recordemos que los amortiguadores son elementos fundamentales para la seguridad en la conducción, por lo que es importante no escatimar en su mantenimiento.
Conclusión
En definitiva, si el aceite se sale del amortiguador, se ven afectados varios aspectos del vehículo, en particular la absorción de baches y vibraciones, lo que puede poner en riesgo la seguridad de los ocupantes del vehículo. Es importante identificar rápidamente cualquier pérdida de aceite y llevar el vehículo a un taller mecánico para su revisión y reparación. Y, por último, recordemos que realizar el mantenimiento periódico de nuestros amortiguadores es uno de los mejores métodos para evitar problemas graves en la conducción.
