El teatro se divide en actos y escenas, lo que nos permite entender una obra de teatro o una película en diferentes segmentos, permitiendo contar la historia de una manera más efectiva. Por lo que es importante conocer las diferencias fundamentales entre escenas y actos. Hay muchos tipos de obras de teatro, desde obras cortas hasta dramas épicos de varias horas. Al conocer las diferencias entre escenas y actos, podremos entender las obras teatrales en un nivel más profundo y disfrutar de ellas con mayor intensidad.
¿Qué es un acto de una obra teatral?
Un acto es una división fundamental en una obra de teatro o película. En general, una obra de teatro o película está compuesta por dos o más actos. Como regla general, el acto es una unidad dramática que cuenta una parte de la historia. El final de un acto a menudo se marca por un evento dramático que lleva a los personajes a una situación de mayor tensión. Esencialmente, el acto es una división de la acción que permite contar una historia más compleja.
¿Cómo funciona un acto?
Si una obra teatral se divide en dos actos, el primer acto presentará los personajes, la ambientación y las situaciones de la historia. También es el momento en que se explica el objetivo principal de los personajes. Por lo tanto, el primer acto puede considerarse como introducción, presentando todo lo necesario para el desarrollo de la trama.
El segundo acto es el momento en que se presentan los conflictos principales. La tensión aumenta, se desarrolla la trama, y llegamos al clímax. Es en el segundo acto que conocemos el destino de los personajes principales, resolviendo la trama. Claro está que esto dependerá de la historia que se esté presentando y en algunos casos pueden haber varios actos o incluso solo uno.
El número de actos
En algunas obras, se dividen en múltiples actos para contar una historia más compleja. En general, cuanto más larga sea la obra, más actos tendrá. Aunque hasta el siglo XVIII era común que las obras se dividieran en cinco actos. Con el tiempo, los dramaturgos han ido reduciendo el número de actos. Actualmente dos o tres actos es lo más común.
División de los actos
Cada acto contiene a su vez, una serie de escenas, que se desarrollan con un decorado y situaciones específicas. Cada acto tiene una estructura interna propia, y sus partes (de igual forma las escenas) pueden variar dependiendo del autor y la obra.
Una obra de teatro de dos actos puede tener la siguiente estructura:
- Acto 1: Introducción, Desarrollo de la trama y objetivo de los personajes.
- Acto 2: Problemas principales y clímax, seguidos del desenlace.
Cada dramaturgo escoge qué historia contar, cómo contarla y cuántos actos requiere para contarla. En cualquier caso, debe haber una estructura clara y un desarrollo de la historia que permita mover la trama hacia un final lógico.
¿Qué es una escena de una obra teatral?
La escena es una unidad más pequeña que el acto. Cada escena puede dar lugar a un cambio de actitud, tiempo, espacio e incluso ritmo en la historia. La escena ocurre en un solo lugar, y puede involucrar a uno o más personajes. Las escenas son partes individuales de la obra que se pueden identificar por la entrada y salida de personajes o por el cambio de ambiente en el que se desarrollan.
Escenas sucesivas
Las escenas sucesivas, que son las que vienen después de una anterior, deben estar total o parcialmente relacionadas con la anterior. Es decir, que las escenas son la manera de unir el conjunto de la obra en diferentes partes, que permiten avanzar en la trama.
¿Cuántas escenas puede haber en un acto?
En general, cada acto tendrá diversas escenas y estas dependen de la historia que se esté contando. Pueden ser varias si se necesita cubrir mucho contenido o pocas, si se busca algo más simple. Lo importante es que estas sean necesarias para la narración y que no queden escenas sueltas. Aunque sean pocas, las escenas deben tener un inicio y fin claros, sin ser interrumpidas por cambio de decoración o por salir de la temática.
¿Qué es un cuadro en una obra teatral?
El cuadro en una obra teatral es cuando los actores están presentes en un mismo lugar. Refleja los diferentes espacios que se tienen en la obra. Esta división de espacio es lo que facilita la representación en la obra de teatro. Por tanto, los cambios de cuadro pueden marcar el final o inicio de una escena, indicando un cambio importante en la trama de la obra.
Escena v. Cuadro
En los fallos más comunes en escritura teatral es confundir una escena con un cuadro. A pesar de tener relación, la diferencia es que una escena es la acción completa que se desarrolla en el mismo lugar y con los mismos personajes, mientras el cuadro es el cambio en el decorado o un cambio en la trama que permite cambiar el escenario donde se están desarrollando las escenas.
¿Cómo se usan las escenas y actos para contar una historia?
Un acto está compuesto por varias escenas, por tanto, para que la historia avance y sea coherente, la secuencia de las escenas debe ser lógica y mantener una relación y un sentido común en la obra. Una buena estructuración de las escenas y actos aporta coherencia y facilita la comprensión de la obra.
Adaptación de los actos
Los actos, según su duración, pueden modificarse. Este proceso se llama “cortar actos”, en el cual se presentan los actos de una forma más resumida. Esto permite mostrar más acción o escenas en el tiempo disponible si se cuenta con el tiempo limitado. Por otro lado, también se puede alargar un acto si se necesitan más detalles o tener una escena importante en particular. Todo esto dependerá de las necesidades de la creación.
¿Cómo trabajar con las escenas en el guion teatral?
Las escenas no solo se pueden dividir por el espacio escénico, sino también por la acción y la temática. Cada escena de una obra teatral debe hacer avanzar la historia hacia el final, siguiendo un esquema establecido. Es importante tener en cuenta que se debe mostrar a los personajes en acción, lo que les indica cómo se mueven y cómo interactúan con su entorno. Las escenas no deben ser superfluas y su contenido debe ser fundamental para el desarrollo de la obra.
La acción en las escenas
La acción es el elemento clave en una escena, pues permite mostrar cómo los personajes interactúan en la historia y permite avanzar la trama. La acción muestra los sucesos que están ocurriendo en la historia y en la que los personajes deben hacer algo para solucionar los conflictos. El público también responde a la acción, por lo que es conveniente que esta sea notable y concreta.
¿Qué cosas deben tener en cuenta los dramaturgos al escribir escenas?
Los dramaturgos deben conocer bien a sus personajes, saber lo que los motiva y lo que los hace actuar. También es importante definir el ambiente para las escenas, que debe ser coherente con la historia y con los personajes en ella. Cada escena en la obra debe ser preparada para que aporte algo a la trama de la historia, tener un propósito y estar claramente definido.
Ambiente y Personajes
El ambiente por tanto es fundamental en la obra, por lo que se debe tomar en cuenta el lugar, la época en la que se desarrolla la trama y la personalidad de los personajes. Al igual que los personajes, el ambiente debe ser coherente con la trama de la historia. Cada personaje en la obra debe tener un propósito y ser coherente con la trama, permitiendo que se puedan descubrir las emociones y comportamientos que los mueven.
¿Cómo se construyen las escenas?
La construcción de una escena debe ser completa. Para ello, es importante tener una introducción, el desarrollo de la acción y el desenlace. La introducción es el momento inicial de la escena, el momento en el que se presenta el problema o la situación a resolver. El desarrollo de la acción es donde los personajes intentan resolver el problema, mostrando la acción y los conflictos que se presentan en la historia. Finalmente, el desenlace es el final de esa escena, mostrando si se ha resuelto o no el conflicto.
Veracidad y coherencia en la escena
Es importante mostrar una coherencia entre las acciones que realizan los personajes y el ambiente donde se desarrollan. Las acciones de los personajes deben ser veraces, no solo hablando de la personalidad de cada uno, sino también de las situaciones a las que se enfrentan. El ambiente tiene siempre que ser coherente con la acción que se palpa en escena.
Conclusión
En conclusión, es importante que la separación de actos y escenas sirva para contar una historia de manera organizada y con mayor efecto dramático. En una escena se mantiene la unidad de acción y de tiempo, mientras que los actos se componen de varias escenas, permitiendo una narración más compleja. La historia de una obra de teatro es importante, pero la manera de presentarla es fundamental para su éxito. Con las herramientas adecuadas, los autores pueden escribir una obra de teatro bien estructurada, manteniendo al público comprometido y disfrutando de la trama en cada momento.