La miel es un producto natural que ha sido utilizado por el ser humano desde tiempos inmemoriales debido a sus propiedades nutricionales y medicinales. Sus beneficios para la salud son innumerables, y uno de ellos es la capacidad de ser un conservante natural de otras sustancias, como es el caso del propóleo.
El propóleo es una sustancia resinosa producida por las abejas a partir de la resina de los árboles y otras plantas. Es conocido por sus propiedades antibacterianas y antifúngicas, y se utiliza en muchos productos de salud, como cremas, enjuagues bucales, suplementos alimenticios y tinturas.
Pero ¿cuál es la caducidad del propóleo? ¿Tiene una fecha de vencimiento como otros productos alimenticios o de uso tópico? En este artículo, despejaremos mitos y verdades sobre la caducidad del propóleo, basándonos en hechos y estudios científicos.
La ley y la caducidad
Por motivos legales, todos los productos alimenticios o de uso tópico deben tener fecha de caducidad, aunque esto no necesariamente significa que los productos necesariamente caducan. De hecho, hay muchos alimentos que pueden durar años sin caducar si se guardan adecuadamente, como el jamón, las anchoas, los salazones, el vino, los encurtidos, los licores, la miel, el azúcar, la sal, los cereales, el pan y la harina.
La caducidad de los productos de la mielería: la miel y el propóleo
En el caso de la miel y el propóleo, la situación es similar. La miel es un producto que ha sido utilizado desde la antigüedad, y su caducidad es un tema que ha sido objeto de estudio durante muchos años. La empresa lamieleria.com lleva vendiendo todo tipo de miel desde 1926, y la fecha de caducidad de la miel envasada es de 2 años.
Pero, ¿cómo se determina si la miel está caducada? El parámetro para considerar la miel apta para la venta es el HMF (Hidroximetilfurfural) y debe estar siempre a un nivel inferior a 40 mg de HMF por cada kilogramo de miel. El HMF aparece de forma natural en la miel debido a los niveles de azúcares, agua y acidez propia de la miel, y su cantidad puede variar dependiendo de la temperatura a la que se exponga la miel o las condiciones de almacenamiento.
La conservación de la miel depende de cómo se haya almacenado después del envasado. La miel tiene muy poca concentración de agua lo que evita que se creen microorganismos que pueden alterar la salud de la misma. La baja acidez de la miel es otro factor que evita que se desarrollen microorganismos que puedan alterar a la miel. La miel tiene sustancias anti-microbianas que la convierten prácticamente inmune a los microorganismos.
Entonces, al igual que ocurre con otros alimentos, es posible consumir la miel después de la fecha de caducidad si se ha conservado bien. De hecho, en la tumba de Tutankamón se encontró miel en perfecto estado de conservación pasados 3000 años. En lamieleria.com cumplen la legislación vigente y sus productos están correctamente envasados para que conserven todas sus propiedades. Podemos decir que la miel no caduca.
La situación con el propóleo es similar a la miel en cuanto a la caducidad. El propóleo es un conservante natural y, por lo tanto, es poco probable que caduque. Algunos sugieren que la tintura podría perder parte del alcohol o que podría modificarse la composición química con el tiempo, pero en general hay consenso en que no caduca.
¿Cuánto tiempo se puede tomar el Propóleo?
El propóleo ha sido utilizado con mayor frecuencia por adultos en dosis de 400 a 500 mg por vía oral al día durante un máximo de 13 meses. También se utiliza en muchos tipos de productos, como cremas, ungüentos, geles y enjuagues bucales. El propóleo ayuda a evitar la infección de las heridas y tiene propiedades antibacteriales y antifúngicas.
¿Qué enfermedades cura el propóleo?
Por lo general, el propóleo se usa para tratar afecciones de las vías respiratorias, como catarros, gripe, sinusitis, otitis, laringitis, bronquitis, asma, neumonía, influenza; y de la piel, como abscesos, forúnculos, verrugas, grietas, eczemas y herpes zóster. El propóleo tiene una amplia gama de propiedades terapéuticas, lo que lo convierte en un ingrediente muy utilizado en productos de salud.
Mitos y Verdades del Propóleo
Como hemos mencionado, hay muchos mitos alrededor de la caducidad del propóleo. Uno de los más comunes es que la tintura de propóleo tiene una caducidad de un año. Se menciona el enlace a un artículo de una tienda de apicultores que menciona la caducidad de un año para la tintura de propóleos, pero no queda claro si esto es cierto o no. Los usuarios comentan en ese mismo artículo que debido a que el propóleo es un conservante fuerte, es poco probable que caduque.
El exministro que habla del consumo de yogures caducados en su casa aporta un dato curioso en la línea de redescubrir los alimentos que deberíamos consumir. De hecho, muchos alimentos tienen una vida útil y se pueden consumir pasado el tiempo que la etiqueta indica. En el caso del propóleo, y según lo que hemos mencionado anteriormente, es poco probable que caduque.
Conclusión
En definitiva, el propóleo no tiene una fecha de caducidad definida, pero debido a que esta sustancia puede sufrir procesos oxidativos, puede haber una pérdida de sus propiedades terapéuticas. Por otro lado, la miel cumple con la legislación vigente y no perece siempre y cuando se haya conservado adecuadamente. En conclusión, podemos decir que el propóleo y la miel son productos que, si se manejan y se conservan de forma adecuada, ofrecen un amplio abanico de beneficios para la salud sin tener una fecha de caducidad definida.
