El agua es un recurso fundamental para la vida en la Tierra. Sin ella, simplemente no existiríamos. Pero a pesar de su importancia, la mayoría de las personas no se dan cuenta de lo valiosa que es el agua y cuán crítico es su cuidado y conservación. En este artículo, hablaremos sobre por qué es tan importante enseñar a los niños sobre la importancia del agua, y las maneras en que los niños pueden ayudar a cuidar y conservar este recurso vital en la escuela y en casa.
La importancia del agua para los seres humanos
La vida en la Tierra existe gracias a la presencia de agua en el planeta. El agua, también conocida como “oro azul”, es vital para la existencia humana y su escasez es preocupante. Aunque tres cuartas partes del planeta sean agua, solo un pequeñísimo porcentaje puede ser utilizado por los humanos. El cuerpo humano está formado en un 70% de agua, lo que explica su importancia para la salud. El agua es el medio donde ocurren reacciones químicas esenciales y también participa en la digestión, regula la temperatura corporal y desempeña otras funciones en el organismo.
El acceso al agua ha sido históricamente motivo de conflictos y guerras, y aún lo es en muchos lugares del mundo. El agua es importante para el resto de seres vivos y su calidad también es relevante. El agua es un medio de transporte de nutrientes y CO2, es sumidero de CO2 y fuente de oxígeno, y es fuente de energía que puede ser aprovechada para producir movimiento, electricidad y calor. En este sentido, el agua es un recurso estratégico para el desarrollo económico y mejora de la calidad de vida.
La escasez de agua
A pesar de que la mayor parte del planeta está cubierto de agua, menos del uno por ciento del agua está disponible para el consumo humano, lo que significa que hay una escasez de agua potable en todo el mundo. El acceso al agua potable es una necesidad básica para la salud y el bienestar humano. En muchas partes del mundo, la falta de agua potable es un problema serio y, por lo tanto, es una preocupación importante en el desarrollo sostenible.
En UNICEF, tienen programas de WASH (agua, saneamiento e higiene) en las escuelas en más de 90 países, llegando a un promedio de 3 millones de niños al año. Este es un esfuerzo importante para garantizar que los niños tengan acceso a agua potable, saneamiento e higiene adecuados, pero hay mucho más que se puede hacer para ayudar a proteger este recurso valioso.
Escasez de agua en las escuelas
El acceso a agua potable, inodoros y jabón en las escuelas es clave para un entorno de aprendizaje saludable. Pero según los datos, en 1 de cada 4 escuelas de educación primaria no hay servicio de agua potable, mientras que en todo el mundo, solo el 69% de las escuelas tienen un servicio básico de agua potable. Casi 600 millones de niños carecían de un servicio básico de agua potable en su escuela en 2016.
La falta de acceso al agua potable no solo afecta a la salud de los niños, sino que también puede afectar su educación. Las niñas tienen más probabilidad de asistir a la escuela aún estando en su periodo si tienen acceso a agua potable e higiene adecuada. Los niños que aprenden hábitos de agua potable, saneamiento e higiene en la escuela, refuerzan conductas positivas aprendidas en sus hogares.
Importancia del cuidado del agua en la escuela
Es importante que los niños aprendan sobre la importancia del agua desde una edad temprana para que puedan comprender su valor y cómo cuidarlo adecuadamente desde el principio. La escuela es un lugar ideal para comenzar a enseñar a los niños sobre la importancia del agua.
Los niños pueden ayudar a cuidar el agua en la escuela al seguir simples acciones que reducen el uso y desperdicio del agua. Los niños pueden cerrar la llave mientras se enjabonan las manos o los dientes. También pueden cerrar las llaves del lavabo mientras se lavan los dientes o se rasuran, y de preferencia utilizar un vaso con agua. Además, instalar una regadera de mano en el baño de la escuela puede ahorrar de 10 a 19 litros por baño.
Cómo cuidar el agua en casa
El cuidado del agua no debe limitarse solo a la escuela. También es importante enseñarles a los niños cómo cuidar el agua en casa. Algunas maneras en que los niños pueden ayudar a cuidar el agua en casa incluyen:
- Tomar duchas más cortas en lugar de baños de inmersión.
- Cerrar las llaves mientras se cepillan los dientes o se lavan las manos.
- Utilizar una manguera para regar las plantas en lugar de utilizar una pistola o regador.
- Asegurarse de que los grifos, regaderas y baños goteen correctamente.
- Recoger y reutilizar el agua de lluvia.
- Reutilizar agua para limpiar utensilios de jardinería o limpiar el patio trasero.
- Utilizar el lavavajillas y la lavadora de ropa con carga completa.
El impacto en el medio ambiente
Uno de los mayores factores que contribuyen a la escasez de agua es la contaminación ambiental. La contaminación del agua puede ser causada por la actividad humana, como productos químicos tóxicos industriales, pesticidas y residuos urbanos, lo que resulta en una reducción del suministro de agua dulce disponible.
Es importante enseñar a los niños sobre los hábitos que contribuyen a la contaminación del agua para que ellos también puedan ayudar a proteger el medio ambiente. Algunos de los hábitos que pueden contribuir a la contaminación del agua incluyen arrojar productos químicos peligrosos, medicinas y objetos de plástico en los inodoros.
Conclusión
En resumen, el agua es un recurso crítico para la vida en la Tierra y su cuidado es vital para protegerlo y conservarlo para las generaciones futuras. La escuela es un lugar excelente para comenzar a enseñar a los niños sobre la importancia del agua y cómo cuidarlo adecuadamente. Además, al enseñar a los niños sobre los hábitos que pueden contribuir a la contaminación del agua, podemos ayudar a proteger el medio ambiente y garantizar un futuro sostenible para todos.