Bienvenidos a este artículo sobre la postura de los autores en sus obras. En la literatura, el autor utiliza diferentes técnicas para establecer su postura y/o perspectiva hacia un tema. ¿Pero cómo podemos identificar estas posturas de manera efectiva? ¿Qué elementos debemos tener en cuenta para comprenderlas? ¡Descubrámoslo juntos!
¿Qué es la postura de un autor?
Según el Diccionario de la Lengua Española, la postura es la “actitud o manera de pensar, obrar o conducirse respecto a algo”. En el contexto literario, la postura hace referencia a la perspectiva, los discursos ideológicos y las opiniones del autor hacia un tema. La identificación de la postura de un autor en sus obras es un elemento clave para entender la obra en sí misma y el impacto que ésta genera en el lector.
Objetividad vs subjetividad
En la literatura, encontramos dos tipos de descripciones: la objetiva y la subjetiva. La descripción objetiva muestra la realidad tal y como es, mientras que la subjetiva presenta la realidad tal y como el autor la percibe. De igual forma ocurre con la postura en las obras literarias. Puede haber autores que buscan ser objetivos en sus escritos y otros que buscan imprimir su subjetividad en sus obras.
Debemos tener cuidado al momento de leer una obra ya que si no prestamos atención podemos llegar a confundir una postura objetivo con una postura subjetiva. Por ejemplo, si el autor hace de un personaje el portador de una postura con la que no está de acuerdo, no significa necesariamente que esta postura sea la del autor. Hay ciertos elementos que nos ayudarán a identificar la postura real del autor, como el uso de adjetivos, el tipo de narrador utilizado y la perspectiva desde la que se narra la historia.
Tipos de narrador
El narrador es quien cuenta la historia y establece la perspectiva desde la que se narra. Podemos encontrar diferentes tipos de narrador, y cada uno de ellos puede afectar la manera en la que el autor establece su postura:
- Terce-persona limitada: el narrador se enfoca principalmente en la perspectiva del personaje principal.
- Tercera-persona omnisciente: el narrador sabe todo. Puede describir los pensamientos y acciones de los personajes, incluso detalles que los personajes no conocen.
- Tercera-persona observadora: el narrador se limita a describir lo que ocurre sin adentrarse en la perspectiva de los personajes.
- Primera-persona central: el narrador es el personaje principal y se cuenta la historia desde su perspectiva.
- Primera-persona periférica: el narrador es un observador cercano al personaje principal y narra la historia desde una perspectiva externa.
- Primera-persona testigo: el narrador es un observador pasivo que relata la historia basándose en lo que vio y escuchó.
- Segunda-persona narrativa: el narrador establece una conexión directa con el lector, haciendo que éste se convierta en el personaje principal de la historia.
Análisis de la forma
El análisis de la forma se enfoca en el uso del lenguaje literario, el análisis métrico de los textos en verso y la exposición de las peculiaridades lingüísticas del texto. En el plano lingüístico, se presta atención a la fonética, la sintaxis y la semántica utilizadas en el texto. Todos estos elementos pueden ayudarnos a identificar la postura del autor en su obra.
El papel del lector
Es importante tener en cuenta que los lectores dan vida al texto al interpretar los matices significativos del lenguaje utilizado por el autor. Es por eso que es fundamental para los autores hacer uso adecuado del lenguaje que quieren usar para expresar sus ideas, ya que de ello dependerá la correcta interpretación de los lectores y, por consiguiente, el éxito o fracaso de la obra literaria.
¿Quién es el autor?
Parte de la tarea de entender la postura del autor empieza por conocerlo. Muchas veces, el análisis de la obra puede dar una idea del autor y su postura, así como de la época y el contexto histórico en el que se escribió. En estos casos, las obras reflejan la sociedad en la que se respira, y la postura del autor puede verse afectada por las circunstancias sociales, políticas y culturales del momento.
¿Cómo identificar la postura del autor?
Identificar la postura del autor puede ser un proceso complejo. Sin embargo, ciertos elementos pueden ayudarnos a identificar de manera más precisa qué postura tiene el autor hacia el tema tratado. Por ejemplo, podemos observar cómo el autor usa adjetivos y adverbios para transmitir sus ideas y sentimientos. Si el autor describe a un personaje con términos demasiado emotivos, es probable que esté transmitiendo su propia postura subjetiva.
Otro elemento importante para identificar la postura del autor es la interpretación del lenguaje utilizado. Si el autor usa lenguaje muy técnico, puede estar buscando crear un efecto objetivo en su obra. En el caso de que el autor esté utilizando una postura subjetiva, podemos observar cómo se utiliza el lenguaje de manera más emotiva y cargada de sentimiento.
¿Qué debemos tener en cuenta para comprender la postura del autor?
Para poder comprender de manera adecuada la postura del autor, debemos preguntarnos cuál es su propósito comunicativo y cuál es su argumento. Una vez que entendemos esto, podemos analizar cuál es su postura y cuáles son las herramientas que utiliza para transmitirla.
Además, es importante tener presente que, pese a haber sido escritos hace años, algunos textos pueden tener vigencia en la actualidad o incluso pueden sentar las bases para futuras reflexiones en ámbitos como la literatura, la filosofía o la política. Es importante no encasillar un texto en una época y comprenderlo en función de su valor literario y cultural.
Fragmento de un artículo de opinión:
Para ejemplificar la identificación de posturas, presentaremos un fragmento del artículo de opinión “Todas las opiniones son respetables, pero esto no significa que todas las opiniones sean correctas”, escrito por Cristian David Molina Cruz:
“Obtener y aceptar opiniones debe involucrar un proceso de crítica personal y análisis dentro de un grupo social. Criticar significa someter a examen, por lo que si alguien no está dispuesto a hacerlo, es mejor que no lo haga. Es necesario tener en cuenta que en una época en la que abundan medios de comunicación de todo tipo y a través de todos los dispositivos, las opiniones se han vuelto tiranas. Son más importantes que las evidencias y la razón.”
En este fragmento, podemos observar la postura subjetiva del autor hacia la opinión personal. Él considera que la opinión personal no tiene mucho peso si no son sometidas a críticas y análisis, y que en muchos casos, compra de una opinión se convierte en una tiranía.
Estrategias para identificar la postura del autor:
Identificar la postura del autor en una obra literaria puede resumirse en el siguiente proceso:
- Identificar la perspectiva desde la que se narra la historia.
- Analizar el tipo de narrador utilizado por el autor.
- Observar el uso de adjetivos y adverbios para identificar la carga emocional que el autor está dando a los personajes o situaciones descritas.
- Interpretar el lenguaje utilizado. Si el lenguaje es muy técnico, es probable que esté estableciendo una postura objetiva. Si el lenguaje es muy emotivo, seguramente el autor está estableciendo una postura subjetiva.
- Preguntarse cuál es el propósito comunicativo de la obra y cuál es el argumento principal.
Conclusión:
En conclusión, para identificar la postura de un autor en sus obras, debemos prestar atención a la perspectiva desde la que se narra la historia, el tipo de narrador utilizado, el uso de adjetivos y adverbios, el lenguaje utilizado, el propósito comunicativo de la obra y el argumento principal. Al entender la postura del autor, podemos comprender mejor la obra en sí misma y el impacto que ésta tiene en el lector.
Recordemos que cada obra es única y que la interpretación de la postura del autor no es un proceso sencillo. Sin embargo, a través del análisis de diversos elementos, podemos identificar la postura del autor y comprender su obra de manera más profunda y significativa.
Por último, recordemos que la obra literaria requiere de un proceso de interpretación por parte del lector. Cada persona tiene su propia perspectiva y visión del mundo, por lo que la interpretación de la obra será diferente para cada uno. Pero al identificar la postura del autor, podemos establecer algunas bases para una interpretación más completa y significativa de su obra.