Aridoamérica es conocida por ser una región cultural que existió hace muchos siglos antes de la llegada de los conquistadores europeos. Localizada en las regiones áridas y agrestes del norte de México y sur de Estados Unidos, la región se caracteriza por tener un clima árido y difícil para la agricultura. Los pobladores aridoamericanos eran nómadas o semi-nómadas y su nivel de desarrollo civilizatorio fue precario.
El territorio de Aridoamérica
Los estados que forman parte del área geohistórica de Aridoamérica en México son Aguascalientes, Chihuahua, Durango, San Luis Potosí, entre otros, así como algunos estados del sur de los Estados Unidos de América como Arizona, Nuevo México y Texas. La región se extiende al norte de Mesoamérica y colinda al noroeste con Oasisamérica. Es una zona desértica a semidesértica con escasas lluvias y temperaturas que pueden llegar a los 50 grados centígrados.
La economía aridoamericana
La economía aridoamericana era precaria, centrada en la supervivencia. Los habitantes de Aridoamérica eran grupos de cazadores recolectores que solo se asentaban en las orillas de los ríos crecidos para aprovechar y cultivar. Utilizaban las pieles de animales como vestido y comían sus cultivos que sembraban solo en épocas de lluvia a las márgenes de los ríos. La economía aridoamericana, aunque sencilla, se basaba en la recolección y la caza.
La organización de la población
Los pueblos aridoamericanos se organizaban social, política y económicamente en la época prehispánica, aunque no de forma sofisticada, lo que les permitió sobrevivir al inclemente clima desértico. Entre los pueblos están los Caxcanes, Conchos, Pimas, Pericues, seris, Tarahumaras, Tepehuanes y Yaquis. Políticamente, al ser sociedades tribales, el chamán era el principal en la tribu. Militarmente se organizaban en bandas muy aguerridas haciendo uso del arco y la flecha para dominar a otros pueblos incluso en Mesoamérica. La guerra era constante en su vida diaria y los pueblos mesoamericanos sufrieron invasiones de grupos chichimecas que en algunos casos se mezclaron con ellos.
Los Caxcanes: una sociedad aguerrida
El pueblo de los Caxcanes, un grupo indígena que habitó la región que hoy ocupa el norte de Jalisco y el sureste de Zacatecas, se caracterizó por ser un pueblo gue rrero y aguerrido que mantuvo constantes conflictos con españoles y otros pueblos indígenas de la región, como los Cocomes y los Cocas. La organización social de los Caxcanes era a través de bandos o fraternidades, cada una liderada por un capitán, quienes se unían para realizar diferentes actividades en beneficio de la comunidad.
Los Tarahumaras: una sociedad rural y aislada
El pueblo Tarahumara, también conocidos como rarámuris, son un grupo indígena que habita la región montañosa de la Sierra Madre Occidental, en el estado de Chihuahua. Esta sociedad es conocida por su gran apego a sus tradiciones, cultura y lengua. Su organización social está basada en pequeñas familias que se agrupan en grandes comunidades rurales autosuficientes que se dedican principalmente a la agricultura y la ganadería.
Los Pericues: una sociedad de cazadores-recolectores
Los Pericues fueron un pueblo indígena que habitó la península de Baja California Sur. Sus sociedades estaban basadas en la actividad de la caza-recolección, aunque también se dedicaban a la pesca y a la recolección de frutas y plantas silvestres. Esta sociedad era nómada y no existían divisiones políticas o sociales jerárquicas, aunque sí existían roles específicos asignados a hombres y mujeres dentro de la toma de decisiones y actividades cotidianas en la comunidad.
La vivienda en Aridoamérica
Los habitantes de Aridoamérica no desarrollaron actividades refinadas como la escritura, la construcción de pirámides y una cultura urbana debido a las duras condiciones en el paisaje desértico. Los habitantes eran nómadas y dependían de la fauna y flora para sobrevivir. Habitaban en las cuevas de las montañas la mayor parte del tiempo y solo se asentaban en pequeñas aldeas durante el invierno.
La alimentación
Los habitantes de Aridoamérica se alimentaban de nopales, agaves, bellotas y consumían la fauna y flora del desierto. Practicaban la caza y tenían hachas, metates de laja, martillos de piedra y arcos con flechas para esta actividad. También practicaron el comercio con pescado obtenido del mar y se establecieron en aldeas durante el invierno. La zona norte de la República Mexicana y el sur de Estados Unidos fueron habitados por grupos humanos que sobrevivieron gracias a su adaptación al terreno y a una alimentación basada en lo que el entorno les ofrecía.
Conclusiones
En resumen, la población aridoamericana se encontraba organizada en sociedades tribales y guerreras, cuyas economías se basaban en la recolección, la caza y el comercio. Sus viviendas eran simples y su alimentación estaba basada en lo que el entorno les ofrecía. A pesar de la dureza de la vida en el desierto, los habitantes de Aridoamérica supieron adaptarse y sobrevivir desde tiempos ancestrales hasta bien entrado el siglo XIX.